Feministas?
Lo que somos es #feminazis y nos vino a morder en el trasero!
Hola todos!
Llevo tiempo sin publicar después que había dicho que retomaría el blog. Mal
por mí, sorrysorrysorry :D, pero ya, me voy a poner en serio porque hay más
cosas que comentar y proyectos a futuro.
Ahora, sobre lo
que nos atañe en este momento, cosa que me viene preocupando hace tiempo y que
casualmente, retocaba ayer con una ‘congénera’ (existe esa palabra?). Es el
asunto de que lamentablemente, los hombres y
las mujeres, lo único que bíblicamente está documentado como creado
específicamente para estar unidos, vamos más desligados que agua y aceite. Hay
varios motivos pero mejor no hablo de ellos específicamente en esta ocasión porque la idea no es abrir
más la brecha (jejeje…) pero sí voy a decir: Ya está bueno de la competencia.
ESE es nuestro problema. Los hombres quieren castigarnos a las mujeres con un
‘te lo dije’ virtual, porque hemos abierto la boca de manera incorrecta, y las
mujeres queremos dar a demostrar un ‘sí podemos’ que solo nos ha llevado a
escupir para arriba y que… todo lo demás. Ya
saben que. Se nos olvidó que estamos hechos para convivir, compartir, NO
para competir.
Resulta que el
feminismo realmente está totalmente desvirtuado. Queremos andar por ahí siendo lo
que de moda está ahora decir: #Feminazis. Las ‘machas’, las cabezas, el
carruaje (el hogar) y los 2 caballos (padre y madre). Por dar a ‘demostrar’ que
podemos, le hemos quitado su rol al hombre y cuál es el resultado? Nosotras
estamos ‘explotadas como cohete’, llevando el carruaje y al otro caballo de
pasajero, cuando ese caballo también quiere correr, aunque a veces parece lo contrario….
Oh sí, también aparecen caballos haraganes pero vamos por partes. Comencemos
con el que sí quiere correr.
Esta práctica de
nosotras las mujeres, y estemos claras niñas, NOSOTRAS nos lo buscamos, es
totalmente contraria a lo que es el feminismo. Fíjense: ‘FEMINI’, no ‘masculi’.
El feminismo ha sido totalmente, repito, mal interpretado. No es usurpar el
puesto de los hombres y convertirnos en las cabezas departamentales. Es tener el
derecho a iguales condiciones humanas, económicas, sociales, etc., pero se nos
olvida que justo por temas de género, algunas cosas podemos hacerlas pero no
necesariamente ‘debemos’. Dios nos dio a todos un punto de quiebre muy
específico: La mujer puede llevar un niño en su vientre. El hombre no.
Si el tiempo es
un todo, asumamos que previo a los bebés, para hombres y mujeres es como sigue:
Mujeres
|
Hombres
|
50%
|
Trabajo
|
50%
|
Trabajo
|
25%
|
Nosotras
|
25%
|
Para ellos
|
25%
|
La pareja
|
25%
|
La pareja
|
100%
|
|
100%
|
|
En un mundo
ideal, claro está. Pero más o menos ahí va.
Post-bebés, se
está quedando como sigue:
Mujeres
|
Hombres
|
60%
|
El bebé
|
50%
|
El trabajo
|
40%
|
El trabajo
|
25%
|
Ellos
|
15%
|
La pareja
|
10%
|
La pareja
|
10%
|
Nosotras
|
15%
|
El bebé
|
125%
|
|
100%
|
|
Se ve la
diferencia Y el problema?
Es por esto que
terminamos ahogadas, rabiosas, resentidas, y sí, somos una tranca de mujer carajo!
Pero cuanto estamos perdiendo??
Quién dijo que
éramos las ‘duras del carruaje’? Quién nos asignó esa tarea? Nosotras.
(#Vienebullying!) pero sí, fuimos nosotras. ¿Saben cuándo? Cuando no solamente
no nos quitamos el carruaje de encima a tiempo, sino cuando además, decidimos
que nosotras lo manejábamos mejor y nos quedamos con el carruaje, el caballo
adicional y las riendas. Estábamos orgullosas! No queríamos compartir! Quedamos
siendo el sexo fuerte! Síiii!.... y? Nos cayó la saliva en la boca.
La solución es
tan simple como antigua mis hijos/hijas:
NIÑAS-NIÑAS-NIÑAS:
Dejen que el
hombre vuelva a llevar el carruaje JUNTO con ustedes. Vuelvan a darle su
confianza. Vuelvan a darle su lugar y respetémoslo. Ahora bien, vuelvan a leer.
Dije: JUNTO. ¿Por qué? Porque efectivamente los tiempos han cambiado y no es
saludable volver 100% atrás, pero sí podemos continuar cercanos.
¿Qué debemos
hacer las mujeres para mantener nuestro lugar, devolviendo al hombre el suyo?
Simple:
No deje de cultivarse:
Estudie,
manténgase al día con el mundo y su entorno. Trabaje pero que esto no la
absorba completamente.
Deje que las cosas pasen:
Sí, que las
cosas se ensucien, que se le pase la hora de la comida, que vaya la luz.
Eventualmente, el hombre también recordará que cuando era soltero, él tenía que
ir a pagar la luz, al súper, que buscar la manera de lavar la ropa, etc.
Deje que el bebé llore:
Me rompen el
corazón a mi también el oírlos llorar, pero si su marido está con usted, ese
llanto encontrará el camino al corazón de papá, y papá también preparará leche,
cambiará pañales, y jugará con bebé.
No descuide su descanso ni apariencia:
Si usted no
respira, adivine qué? Se va a ahogar. Literalmente. Un día la frustración la va
a atragantar, va a romper a llorar, a mandar a todo el mundo al carajo y sí, se
habrá desahogado, pero habrá ahogado a los demás con el enojo. Ese tiempo
privado es suyo, para respirar, para el salón, para hablar bobadas con una
amiga, pero cuanto le va a ayudar cambiar el panorama.
NIÑOS-NIÑOS-NIÑOS:
Dejen de hacerse
los chivos locos. Aprendimos la lección. Somos buenas, unas duras, unas
bacanas!.... pero necesitamos de ustedes y de su ayuda. Lo aceptamos. ¿Cómo
pueden hacer para que recojan sus riendas? Fácil:
No se olvide de que usted NO ES MAS
SOLTERO:
Eligió el tener
hogar, mujer, familia. Eso requiere de su presencia. No se hace solo. Las
comidas no aparece mágicamente ni las facturas se pagan solas. Los niños no se
cambian solos para ir a la escuela. Participe. Las noches de rumba porque
‘usted es el que provee’ y ‘usted es el hombre’… ¿adivine qué? Quedaron atrás.
Esto no es opcional. Fue SU decisión.
No deje de cultivarse ni de avanzar:
Los tiempos
cambian, avanzan. Todos debemos ir con él o quedamos rezagados. Si su mujer
avanza sola…. Lo va a dejar atrás, y solo. Lo va a bajar del carruaje que usted
le está dejando llevar.
No sea aéreo:
No hay cosa que
le más cuerda a una mujer, que un hombre que vive inventando pendejadas y que
‘descubrió’ la idea de hacerse millonario de la noche a la mañana. Todas las
mujeres sabemos que eso es ir al fracaso en supersónico, y no hay prueba más
fuerte para una persona/pareja/familia, que la inestabilidad económica. Todos
tenemos derecho a tiempos malos y buenos. Son naturales y parte del vivir. Lo
que no soportamos las mujeres es que en el entusiasmo del hombre, se vayan
todos los ahorros por ‘la nueva más maravillosa
idea del mundo mundial y más allá’. No sea pendejo. Rico de la noche a la
mañana no existe y las mártires ya no vienen. Damos apoyo, sí, pero con
garantías de retorno (Vuelve #bullying #chapeadora, etc. Jajajaja!). Volver a
retomar su puesto como proveedor es parte del trato, no se haga el loco.
No deje el futuro para después y
planifíquelo con su mujer:
El seguro
médico, la casa propia, los estudios superiores de sus hijos, el fondo de
emergencias.
A los hombres no hay que decírselos pero no
descuide su break:
La salida con
los amigos a hablar de política, deportes o lo que quiera, es necesaria. No
solo por usted, sino porque permite que todos, mujer y familia, se extrañen.
Porque le recordará que el mundo todavía continúa.
No descuide su tiempo de familia y pareja:
Redescubra su mujer.
Dense un paseo a solas, una cita, un fin de semana. Hablen FUERA de la casa y
de la cama. Verá que novedad! Redescubra la última de sus hijos que le hará
morir de risa. Observe su conducta. Disfrute su familia!
Ambos,
Niños y Niñas: Redistribuyan comprometidamente el tiempo:
o
Trabajo
o
Descanso
o
Recreación
o
Familia
o
Pareja
o
Personal
Y no tiene que
necesariamente ser igual para cada uno, pero sí se deben encontrar a medio
camino con el que cada uno se sienta más cómodo en una cosa y otra. Quizá a uno
le guste más el tiempo personal y a otro el de recreación, si cada quien cede
allí, el tiempo de pareja puede ser el compromiso mutuo de cantidad equitativa.
Las mujeres
vivimos de los mimos y los cariñitos, los detalles. Los hombres de la
reafirmación de ser el ‘jefe de la manada’, nuestro ‘soporte’. Es, de nuevo,
nuestra decisión mantener las relaciones con nuestras parejas. Es un trabajo:
Cuando su empresa quiere agradar a un cliente, ¿Qué hace? Lo felicita en su
cumpleaños, le envía un regalito en Navidad. Lo invita a cenar de vez en
cuando. Lo mantiene al tanto de sus actividades que le dejan saber la solidez
de la empresa…. ¿Cogió la señal?...
¿Me he pasado de
hablar? A lo mejor un poco pero no van a negar, Niñas y Niños que es verdad.
Particularmente creo que los lugares se deben volver a tomar, pero claro,
siempre manteniendo el respeto y el compromiso mutuo que les va hacer renovar lo que llamamos amor. ¿Sabía
usted que el amor es una decisión? Pues así de sencillo es. Pero eso es tema de
otro post, así que por ahora, chao-chao Mickey Mouse! No olviden dejar sus
comentarios para debatir el tema!!
#Peace!!